miércoles, 21 de mayo de 2014
CUENTOS QUE LLEGAN AL ALMA
Mentras estaba embarazada de mi hija, cientos de interrogantes y dudas sobre su futura educación y la formación de su personalidad asaltaban mi cabeza. Ninguna de ellas sería tan importante como las que la realidad, posteriormente, se encargó de demostrarme. La filosofía educativa, el desarrollo de la personalidad...son ciertamente "asuntos mayores", pero en el día a día quedan eclipsados por cuestiones, en apariencia livianas, que son las que luego constituirán la base de su carácter , de la convivencia familiar y por qué no, muchas veces de la supervivencia.
Si alguno de vosotros, como yo, habéis tenido la suerte de dar a luz a una de esas encantadoras criaturas empeñadas en hacer siempre su santa voluntad, pese a quien pese, y decididas a convertir cada acto cotidiano en una dura afrenta, comprenderéis que, a veces, las mayores satisfacciones y las grandes hazañas están en conseguir que se pongan los guantes cuando el termómetro marca bajo cero o que el lavado de pelo no acabe en una batalla de lágrimas, jabón y gritos.
Hay especialmente una edad, entre los 2 y 4 años, en la que las explicaciones y el diálogo sereno no resultan suficientes, simplemente porque sus tiernas mentes no saben aún de fenómenos físicos ni atmosféricos, ni mucho menos de medicina preventiva ni socialización. Tampoco los severos castigos y las broncas resuelven mucho, sino que entran a formar parte de una escenografía que les puede resultar atractiva por convertirlos en el centro de atención. Y en el peor de los casos, sólo servirá para "domesticarlos" superficialmente incrementando sus fobias.
Instisfecha con las vías transitadas, un día probé una tercera, pensando que no tenía nada que perder, y los resultados, aunque irregulares, fueron buenos.
La receta es sencilla: todo consiste en convertir el objeto/situación odiado por nuestro hijo en algo mágico, divertido y sugerente. Y para ello, nada mejor que envolverlo en fantasía, aderezarlo con imaginación y presentarlo en forma de cuento. Eso sí, breve, porque la mayoría de las situaciones así lo requieren. Y de esta manera surgió ; "CUENTOS PARA PEQUEÑOS TESTARUDOS". Diferentes situaciones de la vida doméstica para poner en práctica esta estrategia. Con gran optimismo por mi parte sólo seleccioné 12 . He aquí algunos ejemplos. "El Mago de la Bata Blanca", ideal cuando se agarran a tu pierna chillando para no entrar en el portal del médico. "Tormenta de Champú", donde la esponja es una nube que descarga sus gotas en el mar que es la cabecita del niño, ante su cabezonada de no lavárselo. "El pajarito que buscaba su nido", con el termómetro como feliz avecilla, y la rama donde guarecerse la axila del pequeño. "La cueva de Alá-Bebé", donde la boca se transforma en una inmensa cueva para albergar cientos de tesoros en forma de alimentos. "Las perlitas del fondo del mar", que no son otras que los dientes, a los que hacemos cosquillitas con el cepillo...
Pero hay veces en que estas situaciones se enquistan y se convierten en patología.
Y de la negativa de querer ir a la guardería, se pasa a un pánico atroz por ir allí y comienzan los problemas. O los celos por los hermanos se enredan hasta el punto de intentar hacerlos desaparecer del mapa a base de pellizcos, manotazos o zancadillas. O no dormir solos en su cuarto....Muchas, infinitas patalogías que ahora mismo están llenando las consultas de psiquiatras y psicólogos infantiles. Y precisamente han sido dos de ellas, la psiquiatra, Carmen Villanueva, y la psicóloga, Ibone Ruiz de Velasco, quienes han catalogado y seleccionado las más comunes para llevar a cabo una terapia muy creativa dándole forma de cuento. Como protagonistas del problema, han elegido un animal, porque consideran que a los niños no se les pude abordar el tema directamente sino buscando un espejo donde se reflejen, y posteriormente lo han novelado en un escenario simbólico aportando una solución final; como ese "...Y colorín colorado, este conflicto se ha acabado". Y luego, con la colaboración de una editorial, las han publicado en forma de álbum ilustrado obteniendo unos resultados espectaculares, tanto que la familia de "terapicuentos" no ha cesado de crecer . Investigando un poco más, he encontrado otra web donde diferentes expertos utilizan el mismo método, lo explican con todo detalle y exponen su catálogo. Aquí os las muestro para que recorráis sus páginas y descubráis cómo la literatura es un pozo de sabiduría que no solo entretiene y forma, sino que además cura los dolores del alma.
http://www.cuentoterapia.com/
http://terapicuentos.com/
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me encantan tus inventos. geniales!
ResponderEliminary qué buena idea lo de la cuentoterapia.
Gracias!!!!Ojalá sirva de ayuda a tantos niños con problemas y padres angustiados!!!Un beso, guapa!!!
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